Luciano-Lucho- lucha y se ilusiona. Drama para la madre: roto el tarro lo reta a la tarde rotando en el patio. Patea en patas. Grita como tigre, roe como reo un pan sin pena.
Lleva la llave del candado encantado. Nada anda. Usa sierra y el cierre cede. Abre la obra. Basta un bastidor para el vasto dibujo debajo del dintel, con pincel.
Poco lo copa. Ni el traje que trajo: se saca el saco en la parra que raspa y ve al perro reptar y trepar como una tropa. Lo atrapa.
Toma té y no tomate, Tomás. Meta mate tras la mata teme un timo, un tema todo dotado de data. Mató vino, no vid sino su jugo, un jugo desgajado y jade, verde de verdad.
Deja de beber: ya no es el bebé de Beba, la madre que rota y lo reta por el tarro roto en el patio mientras patea en patas.
Es Luciano, Lucho, que lucha y se ilusiona con la luz azul, a su lado, como duende, donde sea. Se ilusiona Luciano, lucha Lucho, y mucho. Macho.
Se aman; amanecen amasando. Tratan tantas tartas tartufas... De un bote lleva botellas. Baña el rebaño de patos que topa callando en la calle Callao. Calla el colla, tapa el tape, pucherea el mapuche, días de guita al diaguita. Puertea el porteño al platense con plata: pleito en la platea.
El tribunal en la tribuna arbitra sobre el vitral. Trasviste la tribu el buitre. Tres viejos con trebejos peinan naipes ahora. Es hora. Roja la jarra rajada, besan el vaso con sonrisa resinosa, re sanos. No rezan. Copan la copa, rascan la tarasca, a casa cortan el tranco, el tronco es corto, lo saltan altos pobres probos. Prueban.
Llega el gallego a su casa sin saco ni caso. Del tano notan su ausencia en esencia. Hay zurra al ruso y el turco terco cortó de manga. Mongo. Felipe perfila y zafa con farsa.
Algo olisquea el galgo de Olga. De Ema y de Ana hay algo que emana esta semana; es maná. Lando orla y decora: está orlando en lo de Cora mientras silba Ana, Silvana, y Alejo de aleja.
Rapé, el perro canela, anhela pero espera pera y durazno; es asno; duro. Bala y se lava la oveja vieja. Chilla el cuchillo por tener tenedor como si escuchara la cuchara. Cava la vaca y el toro atorado levita. Lo evita Evita.